¡¡¡Food Morning!!!!
Este verano he estado en el País Vasco y como siempre el restaurante Zuberoa era parada obligatoria. Ya sabéis que me encanta conocer sitios nuevos pero hay clásicos como este que no pueden faltar en mi ruta.
El sitio es espectacular de bonito, un caserío antiguo súper acogedor y con una gran personalidad. Su chef, Hilario Arbelaitz es para mi uno de los mejores cocineros del panorama nacional. Hace una cocina tradicional exquisita y utiliza un productazo, una combinación perfecta para mi.
Esta vez pedí unos raviolis de cigalas con pasta Wong Tong, un cochinillo para morirte y una tarta de queso de locos, aunque he de confesar que probé los platos de todos y cada cuál estaba más bueno.
Os dejo fotos para que veáis por qué no puedo dejar de visitar Zuberoa cada vez que voy al norte, espero que se haga la boca agua!
Besos,
Samy