Pelamos y troceamos las frutas y las metemos en un robot de cocina o una batidora. Añadimos la leche y las semillas de lino y trituramos todo hasta conseguir una textura de milkshake, espesa y sin tropezones.
Servimos en una copa o un bol y añadimos por encima los 30 g de Special K Classic para darle ese toque crujiente.
También te puede interesar...