Esta receta tradicional es sencilla, rápida de hacer y con mucho sabor. Es imprescindible hacerla en temporada de guisantes -nada como un plato con verduras ¡que llene el apetito!
Para los guisantes, vamos a picar el ajo y la cebolleta muy finos. En una sartén con un poco de aceite de oliva virgen extra los pocharemos hasta que estén blanditos pero sin que tomen color.
Añadiremos los guisantes y los cocinaremos tapados hasta que estén tiernos, con cuidado de no pasarnos de cocción.
Cortaremos la panceta en daditos y en otra sartén la salteamos hasta que quede crujiente. Aquí no es necesario añadir aceite porque la panceta se hará con su propia grasita.
Para los huevos, en una olla ponemos a hervir agua junto con un chorrito de vinagre. Antes de que empiece a hervir bajamos el fuego, rompemos y echamos el huevo en el agua, damos vueltas con una cuchara y los escalfamos. Lo retiramos del agua con una espumadera y los hacemos de uno en uno. Es importante que el agua no rompa a hervir.
Para el emplatado, colocamos en un plato hondo el estofado de guisantes como base, colocaremos encima el huevo, añadiremos los taquitos de panceta crujiente y salpimentamos.
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6 comentarios
Sencilla y rica.
Hola Samantha, cuanto tiempo tienen que cocer los guisantes y los huevos?
¡Me encanta al receta!?
¡Súper útil!
¡Te felicito! Lo has echo genial, buen trabajo. ?❤
Eres única !!!!!
Sencillamente ?
Una receta fàcil i rica
y si los guisantes son congelados los tengo que cocer primero ?